¿Por qué mi chimenea no calienta?

¿Por qué mi estufa de leña no calienta?

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Imagina que acabas de adquirir una chimenea o una estufa de leña y, tras haber realizado una inversión en ella, te encuentras que la chimenea no calienta tanto como pensabas. ¿Qué puede ocurrir?

En este post te vamos a informar de las posibles causas y soluciones a este problema. Es fundamental, antes de tomar cualquier decisión precipitada, analizar bien la situación, ya que quizás es todo más sencillo de lo que pensabas.

Potencia calorífica

Una de las primeras características que solemos mirar en de la ficha técnica de la estufa o de la chimenea, es su volumen de calefacción y compararla con la estancia que queremos calentar. Esto está bien, pero no debemos quedarnos en este paso. Debemos tener en cuenta más aspectos: ¿Cómo es nuestra zona climática en la que vivimos? ¿Cómo son los inviernos en nuestra zona?

También es fundamental conocer cómo es el sistema de aislamiento de nuestro hogar y cómo está orientada la vivienda.

Imaginemos dos viviendas en dos lugares distintos. Una de ellas, los inviernos no suelen bajar de 0ºC. En la otra, los inviernos pueden alcanzar -10ºC. ¿Necesitamos una misma estufa con la misma potencia calorífica? Lógicamente no. Cada vivienda necesita una potencia calorífica acorde con su zona y su vivienda.

Antes de adquirir tu estufa, contempla todas estas características y, si tienes dudas, contacta siempre con un profesional que pueda guiarte antes de la compra.

Si ya hemos adquirido la estufa y vemos que no calienta lo suficiente, podemos optar por cambiar el aparato o mejorar el aislamiento de la vivienda.

La leña

Imaginemos que hemos superado el primer apartado y hemos adquirido la mejor chimenea para nuestro tipo de vivienda, el aislamiento es el adecuado y la potencia calorífica es la correcta para nuestro hogar. Sin embargo, la estufa de leña no calienta.

¿Cuál es la mejor leña para la chimenea?

Muchas de las veces que esto ocurre es debido a que no estamos usando la leña correcta para nuestro aparato. Te recomendamos leer el post “¿Cuál es la mejor leña para la chimenea?”.

Es importante conocer los tipos de leña. No debemos usar leña resinosa y con una humedad superior al 20%.

Tiro de la chimenea

El tiro de la chimenea puede ser otra de las causas que no dejen que nuestra chimenea rinda a pleno pulmón. La instalación del tiro de la chimenea es una parte importantísima.

Hay veces que, por el tipo de vivienda que tenemos, el profesional ha tenido que instalar una gran cantidad de metro de tubo. Esto produce que el calor se vaya por el tubo. Contando con que la instalación es correcta, la solución, en este caso, es colocar un corta-tiros.

Nota: Debemos contactar con profesionales antes de instalar cualquier elemento en nuestro aparato.

Carga de la cámara de combustión

La cámara de combustión es el lugar donde colocamos la leña y que, posteriormente, se quemará. Estas cámaras tienen dimensiones distintas dependiendo del modelo de aparato que adquiramos.

Debemos conocer la cantidad que debemos poner de leña. Cuando no se pone la cantidad correcta o, si nos quedamos cortos de leña, el calor no será el suficiente y las juntas o los tubos del aparato se deteriorarán.

Normalmente debemos cargar ¾ partes de la cámara y debemos conocer cómo realizar el encendido de la forma correcta. Puedes visitar nuestro post “Encendido y funcionamiento de una estufa de leña” para ayudarte en este aspecto.

Ubicación del aparato

Cuando adquirimos este tipo de productos, es fundamental saber qué lugar es el correcto para llevar a cabo su instalación. Para ello, debemos conocer las corrientes de aire de la vivienda.

Si, por ejemplo, instalamos una chimenea cerca de una escalera o una estancia abierta cercana al aparato, quizás la corriente de aire se lleve el calor hacia otras zonas de la vivienda que no deseamos.

Una solución para conocer el camino que el calor recorrerá en la estancia donde coloques el aparato es encender una barra de incienso y ver hacia dónde se dirige el humo.

Colocar estufa de leña en el salón de la vivienda

Estas son algunas de las posibles causas a la pregunta ¿por qué mi chimenea o estufa de leña no calienta? Si ninguna de ellas se ajusta a tu caso, contacta siempre con un profesional o con el soporte técnico de la web o tienda en la que adquiriste la estufa para que puedan guiarte mejor.

¿Te ha parecido útil este artículo? Échale un ojo a nuestro blog y encuentra soluciones y recomendaciones para ayudarte con tu chimenea o estufa de leña.

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