Cómo limpiar una estufa de leña sin dañarla | Así lo hacemos en Panadero

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La estufa de leña ha sido una de las más vendidas durante la temporada de invierno. Sin embargo, con la llegada del verano, también llega el momento de apagarla y prepararla adecuadamente para la próxima temporada de frío. Para asegurarte de que el aparato esté en buenas condiciones el próximo invierno, es importante realizar una limpieza y mantenimiento adecuados al final de la temporada. En este artículo te mostramos cómo preparar y limpiar eficazmente una estufa de leña, además de algunos consejos útiles para mantenerla en buen estado durante el verano.

Cómo limpiar una estufa de leña.
Una estufa de leña no se limpia, se cuida. Porque lo que tienes delante no es un objeto cualquiera de la casa, ni un rincón decorativo: es una pieza que ha vivido el fuego, que ha dado calor real y que está hecha para durar… si sabes cómo tratarla. La tentación de usar cualquier producto de limpieza para dejarla “como nueva” es grande. Pero si lo haces, puedes acabar dañándola. La pintura termorresistente no admite experimentos. No le gustan los limpiadores “multiusos”, los paños mojados ni las prisas. Así que te vamos a explicar cómo hacerlo bien. Sin fórmulas mágicas, sin mitos, sin estropear nada. Solo lo esencial. Como lo haría quien sabe lo que tiene entre manos.

Con qué limpiar el exterior de una estufa de leña.
Lo más importante que debes saber es esto: las estufas de leña, como las de Panadero, están recubiertas con pintura termorresistente. Este tipo de pintura está pensada para resistir altas temperaturas, no productos de limpieza agresivos. Por eso, el mejor modo de limpiarla también es el más sencillo: un paño seco. Nada más. Nada de multiusos, ni sprays con aroma a limón, ni productos que usarías en la encimera de la cocina. ¿Tiene polvo? Se retira con suavidad. ¿Alguna mancha superficial? Igual: sin frotar como si fuera una sartén. Piensa en tu estufa como un objeto delicado, aunque esté hecha de acero. ¿Tienes una mancha más complicada? Sigue estos tres pasos:

  1. Retira el polvo de la zona afectada.

  2. Lija suavemente el área con cuidado, sin excederte.

  3. Aplica una pintura en spray termorresistente específica para este tipo de superficie. Aquí puedes ver cómo hacerlo: https://vimeo.com/747203551

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¿Y cubrirla con una funda? Mejor no.
Puede parecer una buena idea: protegerla del polvo con una funda durante los meses cálidos. Pero no es recomendable. Cubrirla con plásticos o telas puede generar humedad y dañar la superficie. Lo mejor es dejarla al aire, limpia y sin nada encima. Si quieres protegerla de verdad, hazlo con mantenimiento, no con cobertores.

Cómo limpiar una estufa de leña con horno.
Si tu estufa de leña tiene horno —como algunos modelos de Panadero— hay que tener aún más cuidado. No se deben aplicar productos, ni por dentro ni por fuera. Lo ideal es dejar que el horno se enfríe un poco (tibio, no caliente), y pasar un paño seco para retirar migas o restos de grasa superficial. Si queda alguna mancha persistente, es mejor dejarla, antes que dañar el acabado o los materiales.

Limpieza de una estufa de leña antigua o heredada.
Si tienes una estufa de muchos años, o incluso heredada, lo mejor es no hacer experimentos. Nada de productos abrasivos ni intentos de restauración casera. Lo ideal es revisar si puede repintarse con pintura termorresistente original, como la que ofrecemos en Panadero. Está diseñada justamente para eso: devolverle un buen aspecto sin comprometer el rendimiento ni la seguridad.

Cómo limpiar los tubos de una estufa de leña.
Aquí sí toca remangarse. Los tubos acumulan hollín, y es importante limpiarlos al menos una vez al año. Puedes hacerlo tú mismo con un cepillo deshollinador del tamaño adecuado, o llamar a un profesional si prefieres evitarte complicaciones. Lo importante es que los tubos estén limpios, para garantizar un buen tiro y evitar humo o residuos. Un sistema limpio calienta mejor, consume menos y es más seguro.

Cuidar la estufa es cuidar tu inversión.
Limpiar bien la estufa, mantener sus piezas en buen estado, no cubrirla ni dañarla con productos inadecuados… todo esto influye directamente en su durabilidad. Una estufa bien cuidada te acompañará durante años, seguirá calentando como el primer día y será siempre eficiente. Además, todo este cuidado forma parte del mantenimiento que te ayuda a ahorrar en calefacción: cuanto mejor rinde la estufa, menos necesitas otras fuentes de calor.

La estufa de leña en primavera.
Si tienes dudas, ¡no dudes en consultarnos! Esperamos que este artículo te haya sido útil. Echa un vistazo a nuestro blog y encuentra soluciones y consejos para sacarle el máximo partido a tu chimenea o estufa de leña. Visita nuestra tienda online para descubrir las estufas de leña Panadero. Si tienes preguntas o necesitas ayuda para elegir el modelo adecuado, estaremos encantados de ayudarte.

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