Cómo evitar la acumulación de creosota en una estufa de leña ecodesign

Contents

Aunque las nuevas estufas ecodesign son construidas con cámaras de combustión específicamente fabricadas para lograr la mayor eficiencia y un proceso de combustión totalmente limpio, esto no quiere decir que se eliminen por completo problemas como el origen de la creosota, una sustancia muy problemática con la que se debe combatir a diario para evadir su creación y sus graves consecuencias. En el post de hoy te enseñaremos los mejores hábitos y consejos que puedes aplicar para mantenerte a ti y a tu aparato fuera de los grandes peligros de la aparición de la creosota y su acumulación en el interior de los conductos que componen tu estufa.

¿Qué es la creosota y cómo se forma?

La creosota es un producto químico que se genera cuando la leña se quema en la estufa. Se trata de una sustancia oscura, pegajosa y alquitranada que se adhiere a las paredes, las puertas, los conductos y la salida de humos de la estufa. La creosota se forma por la combinación de los ácidos que se liberan durante la combustión de la leña con la humedad que contiene el aire o el propio combustible. Cuando la temperatura de la chimenea o el conducto es baja, la creosota se condensa y se solidifica, formando una capa cada vez más gruesa y dura. Esta sustancia se tiende a confundir con el hollín, otro material originado por la falta de limpieza y cuidados de la estufa.

Hollín y creosota

Diferencias entre el hollín y la creosota

Estas son las principales diferencias que poca gente sabe entre estas dos sustancias tan molestas:

  • La creosota es una sustancia pegajosa, espesa y oleosa, que contiene una mezcla compleja de compuestos orgánicos. El hollín es una sustancia sólida, fina y pulverulenta, que contiene principalmente carbono.
  • La creosota se forma por la combinación de los ácidos que se liberan durante la combustión de la leña con la humedad del aire o del propio combustible. El hollín se forma por la combustión incompleta de la leña.
  • La creosota se adhiere a las paredes, las puertas, los conductos y la salida de humos de la estufa o chimenea. El hollín se deposita en el fondo o en la bandeja de la estufa o chimenea.
  • La creosota es más difícil de eliminar que el hollín, ya que requiere productos químicos o herramientas especiales. El hollín se puede eliminar con facilidad con un cepillo o una aspiradora

¿Qué peligros conlleva la acumulación de creosota?

Problemas dermatológicos y respiratorios

La irritación de las mucosas y la piel por la creosota puede ser causada tanto por el contacto directo con la sustancia como por la exposición al humo o al polvo que se desprende de la madera tratada con creosota. La irritación puede ser más severa si la piel está húmeda o si se expone al sol. La irritación puede durar desde unas horas hasta varios días, dependiendo de la intensidad y la duración de la exposición. 

Aumento de riesgo de explosiones e incendios

Las explosiones o incendios por la creosota pueden ocurrir si la temperatura del conducto o la chimenea supera los 200°C. Esto puede suceder si se quema leña húmeda, se cierra el tiro de la estufa o se produce un efecto chimenea inverso. Las llamas pueden propagarse rápidamente por el conducto o la chimenea y alcanzar el tejado o las paredes de la casa. Estos incendios pueden ser difíciles de controlar y apagar, además de no solo poner en riesgo la estructura del aparato, sino de tu hogar y la salud de sus habitantes.

Intoxicaciones

La intoxicación por monóxido de carbono por la creosota puede ocurrir si el humo no sale correctamente por el conducto o la chimenea y se acumula en el interior de la casa. El monóxido de carbono es un gas que se produce por la combustión incompleta de la leña y que impide el transporte de oxígeno en la sangre. Los síntomas de la intoxicación pueden incluir dolor de cabeza, mareos, náuseas, vómitos, debilidad, confusión y pérdida de conciencia. En casos graves, puede provocar consecuencias incluso mortales entre las personas que se vean muy expuestas a estos gases.

Intoxicaciones creosota

Eliminar la creosota de tu estufa

Con la utilización de estos métodos conseguirás eliminar la creosota de tu estufa si no has podido prevenir su creación:

  • Apaga la estufa y deja que se enfríe por completo. No intentes limpiar la creosota cuando la estufa está caliente, ya que puede ser peligroso.
  • Abre la puerta de la estufa y retira las cenizas con una pala o una aspiradora. Ten cuidado de no respirar el polvo o el humo que pueda salir de la estufa.
  • Con un cepillo de alambre o un deshollinador, frota las paredes, las puertas y el brasero de la estufa para eliminar la creosota adherida. Aspira los restos que caigan al fondo de la estufa.
  • Desconecta la tubería de la estufa y llévala al exterior. Con el mismo cepillo o deshollinador, limpia el interior de la tubería para eliminar la creosota acumulada. Aspira los restos que salgan por los extremos de la tubería.
  • Vuelve a conectar la tubería a la estufa y asegúrate de que quede bien fijada. Cierra la puerta de la estufa y comprueba que no haya fugas de humo o aire.
  • Repite este proceso al menos una vez al año o cada vez que notes que la estufa funciona mal o produce mucho humo.

Limpieza de creosota

¿Cómo podemos prevenir la creación de creosota?

La mejor manera de evitar la acumulación de creosota en tu estufa de leña ecodesign es prevenir su formación mediante unas buenas prácticas de uso y mantenimiento del aparato. Estas son algunas recomendaciones que puedes seguir:

  • Utiliza leña seca y bien curada: Con un contenido de humedad inferior al 20%. La leña húmeda o verde genera más humo y más ácidos que favorecen la formación de creosota. Además, quema peor y produce menos calor.
  • Mantén un fuego vivo y constante en tu estufa: Sin dejar que se apague o se reduzca a brasas. Esto te permitirá mantener una temperatura alta en el conducto o la chimenea, lo que evita la condensación y solidificación de la creosota.
  • Regula adecuadamente el aire primario y secundario: De tu estufa para conseguir una buena combustión. El aire primario es el que entra por debajo del fuego y alimenta las llamas. El aire secundario es el que entra por encima del fuego y ayuda a quemar los gases. Si hay demasiado aire primario, el fuego será muy intenso y consumirá la leña rápidamente, pero generará más humo y creosota. Si hay demasiado aire secundario, el fuego será más débil y producirá menos calor, pero quemará mejor los gases y reducirá la creosota. Lo ideal es encontrar un equilibrio entre ambos tipos de aire para lograr una combustión óptima y eficiente.

Puedes encontrar estos consejos entre muchos otros en nuestra entrada de Blog sobre la seguridad en tu estufa.

Creosota acumulada

Conclusión

Como has podido ver, la creosota es un residuo peligroso que se forma en tu estufa de leña ecodesign y que puede causar problemas de salud, seguridad y eficiencia. Por eso, es importante que sigas las recomendaciones que te hemos dado para evitar su formación y acumulación. Recuerda utilizar leña seca y bien curada, mantener un fuego vivo y constante, regular adecuadamente el aire primario y secundario y limpiar periódicamente el conducto o la chimenea con ayuda de un profesional. Así podrás disfrutar de tu estufa de leña ecodesign con seguridad y comodidad.

Si tienes alguna consulta, ¡no dudes en preguntarnos! Esperamos que este post te haya servido de guía. Échale un ojo a nuestro blog y encuentra soluciones y recomendaciones para ayudarte con tu chimenea o estufa de leña.

Visita nuestra tienda online de estufas de leña Panadero. Si tienes alguna pregunta o necesitas ayuda para elegir la estufa adecuada, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de ayudarte.


Artículos relacionados:

 

Si te ha gustado el artículo, ayúdanos a difundirlo 😊 . Haz clic en los botones de aquí abajo y ¡no dudes en compartirlo en tus redes sociales!

¡Gracias por leer!

↓      ↓      ↓      ↓

 

Facebook
LinkedIn
WhatsApp
Telegram
Email

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *